El desmán ibérico es característico entre otros de los siguientes hábitats:
Bosques aluviales de Alnus glutinosa y Fraxinus excelsior (Alno-Padion, Alnion incanae, Salicion albae).
Descripción y Estado de conservación:
Este tipo de hábitat se distribuye a lo largo de las riberas ibéricas occidentales y septentrionales, siendo más común en zonas silíceas.
La aliseda es un bosque ribereño situado en primera línea respecto al cauce, en suelos muy húmedos o encharcados, influidos por las crecidas periódicas. Es un bosque cerrado y umbroso, sobre todo en los barrancos, donde forma galerías al contactar las copas de ambas orillas. La falta de luz limita la presencia de elementos leñosos, aunque en las más abiertas se pueden observar Frangula alnus, Crataegus monogyna, Sambucus nigra, Evonymus europaeus, Salix salviifolia, etc. El estrato herbáceo esta representado por Ranunculus ficaria, Glechoma hederacea, Oenanthe croccata, Carex laevigata, etc.
Las alisedas septentrionales presentan habitualmente Fraxinus excelsior, Populus tremula, Betula alba, Ulmus glabra, Acer pseudoplatanus, Prunus padus o Pyrus pyraster, y especies herbáceas como Senecio nemorensis, Valeriana pyrenaica, Lamiastrum galeobdolon, etc. Ciertos helechos de climas templados o subtropicales encuentran en estos bosques refugios, especialmente en los más atlánticos: Osmunda regalis, Davallia canariensis, Woodwardia radicans o Culcita macrocarpa (las dos últimas en el Anexo II de la Directiva Hábitat).
En las alisedas occidentales y bajo clima mediterráneo se suele presentar Fraxinus angustifolia, desapareciendo la mayoría de los árboles eurosiberianos, pero manteniendo un cortejo florístico típico de bosques caducifolios, con diversas especies de distribución occidental ibérica (Galium broterianum, Scrophularia scorodonia, Carex paniculada subsp. lusitanica, etc).
La fauna está muy ligada a la presencia de agua, con aves como la lavandera cascadeña o el mirlo acuático, y mamíferos como el desmán ibérico, el musgaño de Cabrera o la nutria.
Estas masas arbóreas, conforme a lo establecido en la Directiva 92/43/CEE del Consejo, son “Bosques (sub)naturales de especies autóctonas, en monte alto con sotobosque típico, que responden a uno de los siguientes criterios: raros o residuales o que albergan especies de interés comunitario”. En este caso se considera prioritario, entendiendo como tal aquellos tipos de hábitats naturales amenazados de desaparición, presentes en el territorio contemplado en el artículo 2 cuya conservación supone una especial responsabilidad para la Comunidad, habida cuenta de la importancia de la proporción de su área de distribución natural incluida en el territorio contemplado en el artículo 2. Estos tipos de hábitats naturales prioritarios se señalan con un asterisco (*) en el Anexo I.
Este tipo de bosques ha sufrido aprovechamientos tradicionales de leñas que han condicionado de forma continua su densidad, pero la reducción del consumo de este combustible, ha favorecido su regeneración.
Bosques galería de Salix alba y Populus alba
Descripción y Estado de conservación:
Choperas, alamedas, olmedas y saucedas distribuidas por las riberas de toda la península ibérica, Baleares y fragmentariamente en Ceuta.
Viven en las riberas de ríos y lagos, o en lugares con suelo al menos temporalmente encharcado o húmedo, siempre en altitudes basales o medias.
En los cursos de agua, la vegetación forma bandas paralelas al cauce según el gradiente de humedad del suelo.
En el borde del agua crecen saucedas arbustivas en las que se mezclan varias especies del género Salix (S. atrocinerea, S. triandra, S. purpurea), con Salix salviifolia preferentemente en sustratos silíceos, y Salix eleagnos en sustratos básicos.
La segunda banda la forman alamedas y choperas, con especies de Populus (P. alba, P. nigra), sauces arbóreos (S. alba, S. fragilis), fresnos, alisos, etc. En las vegas más anchas y más alejadas del cauce, ya en contacto con el bosque climatófilo, crece la olmeda (Ulmus minor). En los ríos del norte peninsular la vegetación de ribera se reduce a la sauceda arbustiva, con especies semejantes a las citadas y alguna propia (S. cantabrica), a veces se presenta una segunda banda de aliseda (91E0), chopera negra o fresneda.
El sotobosque lleva arbustos generalmente espinosos, sobre todo en los claros (Rubus, Rosa, Crataegus, Prunus, Sambucus, Cornus, etc.), herbáceas nemorales (Arum sp. pl., Urtica sp. pl., Ranunculus ficaria, Geum urbanum, etc.) y numerosas lianas (Humulus lupulus, Bryonia dioica, Cynanchum acutum, Vitis vinifera, Clematis sp. pl., etc.).
De estos bosques resulta característica la avifauna, con especies como el pájaro moscón (Remiz pendulinus), la oropéndola (Oriolus oriolus), el mirlo acuático (Cinclus cinclus), etc., y entre los mamíferos, la nutria (Lutra lutra) y el desmán ibérico (Galemys pyrenaicus).
Estas masas arbóreas, conforme a lo establecido en la Directiva 92/43/CEE del Consejo, son “Bosques (sub)naturales de especies autóctonas, en monte alto con sotobosque típico, que responden a uno de los siguientes criterios: raros o residuales o que albergan especies de interés comunitario”.
Este tipo de bosques han sufrido aprovechamientos tradicionales de leñas que han condicionado sus densidades y conformación del arbolado, presentando fustes desmochados como sistema tradicional, pero la reducción del consumo.